Author: Claudia M. Elsig, MD
Las relaciones estables basadas en el apoyo mutuo son increíblemente poderosas. Las investigaciones han demostrado que la alta calidad marital está asociada con menor presión sanguínea, menor estrés, menos depresión y mayor satisfacción vital.1
Pero, aunque una relación equilibrada y saludable tiene un buen impacto en el bienestar, no todos los matrimonios funcionan así de bien. Las críticas, las peleas, o sentirse abandonado por su pareja puede hacer estragos en su salud mental.
«La gente siempre se enamora de los aspectos más perfectos de la personalidad del otro. ¿Y quién no? Cualquiera puede enamorarse de las partes más maravillosas de otra persona. Pero ese no es lo más inteligente. Eso sería más bien pensar lo siguiente: ¿Puedo aceptar los defectos? ¿Puedo mirar los defectos de tu pareja con honestidad y decir: ”Puedo aceptar esto, o puedo hacer algo con ello”? Porque lo bueno siempre va a estar ahí, y siempre va a ser bonito y brillante, pero lo malo que hay debajo puede arruinarte».
– Elizabeth Gilbert
Mantener una relación sana es difícil, y sobrevivir al matrimonio más allá de la luna de miel es un rato para muchas parejas. El estrés y las tensiones diarias, la aparición de los hábitos molestos, los bloqueos comunicativos y la disminución de la conexión emocional puede hacer que descarrile una relación que, de lo contrario, podría ser una relación feliz.
Tristemente, el divorcio es un fenómeno en alza, común en la sociedad occidental. Un matrimonio puede destruir su salud mental.
Así es como puede hacerlo.
Conflicto marital
Cualquier desacuerdo en un matrimonio es estresante, pero si se gestiona como es debido, los conflictos pueden ayudar a la pareja a saber más el uno del otro y mejorar su relación.
Sea como sea, los conflictos que no se resuelven son dolorosos. Cuando hay peleas continuas en una relación, esto restringe los procesos que llevan hacia una buena salud mental, según sostienen las investigaciones.2
Ante un conflicto continuo, una persona puede sentirse rechazada y desconectada emocionalmente, y esto limita el deseo de buscar apoyo. Los conflictos no resueltos pueden influir en el sueño y el estado de ánimo y provocar ansiedad y depresión. Cuando el futuro del matrimonio no es prometedor, puede experimentarse un sentimiento de desesperanza perenne.
La discordia conyugal también repercute en otras áreas de la vida, como la crianza de los hijos o el trabajo. Por ende, los síntomas depresivos llegan indirectamente a través del deterioro funcional.2
Hay muchas consecuencias en la salud asociadas al conflicto marital. Un estudio que tomó datos de 250 parejas durante más de 20 años concluyó que las parejas que peleaban frecuentemente al principio de su matrimonio eran propensas a seguir este patrón, y las parejas que discutían frecuentemente eran más propensas a sentirse solos y experimental una peor salud física que la media de personas con su misma edad.3
El conflicto en una relación puede causas respuestas dañinas en el cuerpo, tales como inflamación, cambios en el apetito y un incremento en la liberación de las hormones del estrés. El estrés continuado afecta a varios aspectos de salud, desde la función cardiovascular hasta el sistema inmunitario.
El conflicto conyugal es particularmente perjudicial para la salud mental si están involucradas la hostilidad, agresión o los comportamientos abusivos.
El apego de los adultos
Del mismo modo que los niños forjan lazos son sus padres desde muy pequeños, el amor romántico también representa un proceso de apego.4 Y lo más importante, el apego de los adultos predice la salud mental: Los adultos que han tenido vínculos positivos cuando eran niños son más propensos a tener relaciones adultas más estables y satisfactorias.
Entonces, ¿qué es el apego?
La teoría del apego explica cómo los individuos crean lazos emocionales para satisfacer necesidades básicas, y cómo los trastornos psicológicos, tales como la depresión y la ansiedad, están conectados con perturbación de estos lazos.
Las formas inseguras de apego en la infancia repercuten en la cercanía y la intimidad emocional en las relaciones adultas. Esto puede hacer que ciertas personas estén más preocupadas por ser infravaloradas o abandonadas por sus parejas románticas.6
Los individuos que no han tenido buenas experiencias de apego mientras eran niños no siempre son retraídos, pegajosos y exigentes. Pero algunas situaciones estresantes pueden hacer que gestionar los deseos del subconsciente y las necesidades emocionales sea más complicado. Por ejemplo, a una persona que haya tenido malas experiencias con el apego en su infancia le puede resultar difícil confiar en su pareja en la edad adulta. Los que tienen una forma de apego más temerosa y evitativa podrían querer más atención.
Así pues, ¿por qué importa la forma de apego en el matrimonio?
La interacción entre dos formas de apego diferentes tiene repercute en la trayectoria de la relación.5 Por ejemplo, un cónyuge inseguro y desorganizado es alguien con quien será difícil estar casado para cualquiera. Sus relaciones son inestables y cambiantes. Este tipo de persona es errática y complicada, y normalmente tiene problemas de salud mental de algún tipo. Casarse con este tipo de persona puede acabar con su salud mental.
El trauma infantil
Sin tratamiento, el trauma infantil continúa afectando a las personas en su adultez. Por ejemplo, una persona que ha tenido un trauma infantil puede ser pasiva, pasivo-agresiva o agresiva en su forma de comunicarse. Puede ser indirecta y apesadumbrada o deshonesta, culpabilizadora y controladora. Estos comportamientos ejercen una gran presión sobre la relación.
El trauma que no ha sanado es una fuerza dinámica en una relación sentimental, que a menudo crea desacuerdos, malentendidos y dudas, todo potenciado por los sentimientos. Para la pareja que lo recibe, puede ser un reto enorme.
Soledad
En un matrimonio, la soledad se da cuando una persona siente que su pareja no entiende sus necesidades y deseos. Una falta de atención incrementa el riesgo de problemas de salud mental, tales como la ansiedad y la depresión. Esto podría ser porque uno de los cónyuges es adicto al trabajo y nunca está en casa, o podría ser un caso peor: ser ignorado por un narcisista.
Sentirse en soledad en un matrimonio tiene consecuencias. Por ejemplo, cuando una persona es solitaria, será menos propensa a participar en actividades como hacer ejercicio, o tener un estilo de vida saludable comiendo sano.
La soledad afecta al sueño, aumenta el estrés, baja la autoestima y causa una espiral de pensamientos negativos.
Toxicidad disfrazada de amor
Los eventos y las circunstancias extremas hacen un daño evidente a la salud mental, tales como la violencia doméstica, por ejemplo. Pero en un matrimonio hay también montones de sutilezas en juego que pueden mermar el bienestar mental.
Conocer a alguien toma tiempo. Los narcisistas pueden ser encantadores al principio de una relación, pero cuando alguien se cansa con uno, la vida puede tornarse muy diferente en uno o dos años, o incluso en unos meses. No hay límite para el daño psicológico que un narcisista puede infligir.
Casarse con un narcisista puede hacer que disminuya su autoestima, debilitar sus relaciones con otras personas y dificultar el acceso a los recursos que le aportan bienestar.
Con un cónyuge narcisista, probablemente vivirá abuso emocional y verbal, mal comportamiento en general y tratamiento silencioso. La ansiedad y la depresión suelen darse a consecuencia del abuso narcisista.
La imposición de familiares
La relación padre-hijo puede tener más efecto del esperado en un matrimonio. ¡Hay cientos de artículos en internet sobre cómo sobrevivir a un matrimonio con los suegros y cuñados!
Sin unos lazos sanos, padres, hermanos y otros familiares cercanos pueden causar conflicto y confusión en un matrimonio. Además, si hay dinero de por medio (como que los padres aporten dinero para comprar una casa, por ejemplo), puede verse en un mayor compromiso.
Esto puede hacer que recaiga mucha presión sobre el matrimonio, y disminuir la autoestima.
Diferencias en la crianza
Es un hecho que los niños añaden estrés a un matrimonio, en especial cuando son pequeños. Es algo común para las parejas el tener diferentes opiniones para todo, incluso para educar a los hijos.
Aunque las diferencias en este asunto es algo esperable, pueden agrietar la relación si no se resuelven. Las diferencias en la crianza pueden llevar a la desconexión emocional y física, la faltade confianza y a cambios en el comportamiento. Los desacuerdos sobre la crianza ponen en peligro la relación e influyen negativamente en los hijos.
El estrés parental, especialmente cuando hay diferencias de opinión, puede llevar a la depresión.
Arreglar la salud mental rota por un matrimonio
Cualquier persona puede llegar a un punto en su vida en el que parezca que no puede continuar o afrontar retos importantes. Las experiencias traumáticas de la infancia, pérdidas, separaciones, abuso psicológico o físico y estrés crónico pueden ser razones para desarrollar miedos, depresión, desgaste, adicciones o trastornos alimenticios.
La Clínica CALDA es un centro privado, gestionado por sus propietarios, especializado en programas de rehabilitación para la salud mental. Usted podrá curarse si su salud mental está destrozada a causa de un matrimonio roto. Llame ahora a nuestro equipo para una conversación privada. Estaremos encantados de facilitarle más información.
Fuentes/referencias:
- Holt-Lunstad J et al. 18 Mar 2008. Is there something unique about marriage? The relative impact of marital status, relationship quality, and network social support on ambulatory blood pressure and mental health. Ann Behav Med. 2008 Abr;35(2):239-44.
- Choi H, Marks N F. 12 Ago 2008. Marital Conflict, Depressive Symptoms, and Functional Impairment. J Marriage Fam. 2008; 70(2): 377–390.
- Beeson L. 21 Oct 2020. Marital conflict causes loneliness, health problems. University of Georgia. College of Family and Consumer Sciences. [Visitado en línea el 16 Mar 2023].
- Hazan C, Shaver P. Romantic love conceptualized as an attachment process. J Pers Soc Psychol. 1987 Mar;52(3):511-24.
- Pirola F. 2011. Together Apart – Attachment Style in Marriage. In Threshold Magazine. [Visitado en línea el 17 Mar 2023].
- Zhang X et al. The relationship between adult attachment and mental health: A meta-analysis. J Pers Soc Psychol. 2022 Nov;123(5):1089-1137.